A la luz de la luna

“Le iba a poner a mi niña Mari Luz, pero la llamaremos Mari Sol que sale más barato”

“Recordad: los cuartos, luego campanadas y luego ya podéis poner la lavadora”

“¿Tu pareja tiene pasta?, pues no sé pero deja que planche a las 18 horas. Entonces es un partidazo"

Por empezar poniendo humor a este artículo, he recuperado solo tres de los cinco millones de memes que circulan por ahí referentes al sablazo descomunal, a la subida sin precedentes de la tarifa de la luz.

Lo de los memes al fin y al cabo es una forma también de protestar y la única masiva, porque reenviar uno desde el sofá mientras vemos, sin descanso, el capítulo 50 de la serie de moda, es algo fácil que se puede llevar, nos reímos pensando que pondremos la lavadora a las 12 o que cargaremos todos los dispositivos en la franja valle, pero ahí cómodos en casita, salir a protestar, incluso escribir una crítica personal desde nuestro propio perfil de Facebook ya igual…es demasiado.

El caso, la realidad es que no hay marcha atrás, el precio varía hasta un 116% entre las horas punta y las valle, el pasado martes entró en vigor la nueva tarifa, así que fuera de bromas, hay que saber un poco de horarios y nuevos hábitos de consumo, a no ser que no te importe duplicar la factura.

Nos suben la luz de forma estrepitosa, luz consumimos todos, en casa, en nuestras empresas, en los organismos, en cualquier lugar. Yo que ando con preocupación por el tema, tengo un resumen de consejitos, que tras leer bastante al respecto, voy a compartir con vosotros por si os ayudan.

Primero, de 12 a 8 podemos respirar un poco, mientras duermes, que trabajen las máquinas, lavadora, lavavajillas, etc.

Segundo, si necesitas algo que requiera de mucho consumo trasládalo al fin de semana.

Tercero, como en veinte días se nos habrá olvidado, pon carteles por la casa, yo he preparado ya algunos: “desconecta el cargador", “apaga la luz del baño", “apaga el aire, no hace tanto calor” y uno que pondré en grande, “creí en vosotros y me habéis jodido", este último debido a que me retumba en mi cabeza, el creer que la luz podría bajar.

También he leído que en las zonas de interior y rurales, como la nuestra, el consumo es mayor que en capitales y costa, no es necesario relatar los motivos pues son evidentes.

Así que nos “ayudan" por todos lados, la despoblación nos acecha sin mesura, pero parece no importar, otro granito para sumar a la montaña de problemas con los que convivimos.

A la luz de la luna que es barata, a la luz de la luna se veían las armaduras brillar, a la luz de la luna todo es claro y se ve bien.